Desde que cogí el camino en esa dirección me sorprendían los grandes bandos de avutardas (Otis tarda), que por esta zona andaban desde muy cerca al pueblo hasta los límites del monte de Villaveza del Agua.
Mi intención era comprobar si todavía quedaban individuos de búho campestre (Asio flammeus) por esta zona ya que siempre a sido muy buena para esta especie.Pero por suerte o por fortuna salí del pueblo demasiado pronto y con lo cuál también llegue allí mucho antes del anochecer. Con estas me metí en el pinar que hay justo por encima del prado y nada más entrar ya se empezaban a oír las primeras especies (Carduelis carduelis, Fringilla coelebs y carduelis cannabina). Adentrándome a la zona donde los pinos están más altos un búho chico me sorprendió ya que salio a toda velocidad entre los troncos.
LLegando al final del pinar un canto extraño para mi sonaba en lo alto de los pinos, este canto "a tropicones" provenía de 4 herrerillos capuchinos que nada más verme cambiaron de posadero a los pinos más cercanos al interior .
Ya que di varias vueltas por el pinar en busca de más búhos chicos si suerte empece a fotografíar la flora que por allí encontraba, dejó imágenes de las diferentes especies que hice foto.
Ya con el alba bien definida empece mi vuelta a casa, y en la zona del Valle ni un solo ejemplar de la especie que fui buscando el búho campestre, pero al llegar a la altura del camino del Espino 1 ejemplar me sobrevoló durante un buen rato me imagino que con curiosidad ya que casi no había luz y el sol solamente se veía en el horizonte entre las lomas.